Hay que incluir a la población infantil en el proceso sanitario.
Informar al paciente sobre su enfermedad y tratamiento es un derecho que no se
limita sólo a los adultos. Facilitar esta información a los niños ingresados
reduce el grado de estrés y de ansiedad que experimentan cuando se ven inmersos
en un entorno desconocido. VER NOTICIA
