SINOPSIS: Los niños necesitan sentirse seguros.
Cuando aprenden a meditar, aprenden también que la seguridad está en su
interior. Si enseñáramos a meditar a todos los niños, el mundo sería un lugar
muy diferente. Los famosos ejercicios de meditación para niños de Maureen Garth
nacieron del deseo de la autora de facilitar a su hija de tres años el tránsito
apacible de la vigilia al sueño. La práctica del “dulce viajar hacia dentro” a
través de sus deliciosos cuentos ayudó a su hija, y a muchos otros niños de
todo el mundo, a sentirse segura y a conciliar el sueño sin temores. En Luz de
la tierra, los lectores, visitantes de un maravilloso mundo de fantasía, podrán
viajar en un barco de vapor, calzarse unas botas que caminan solas y depositar
sus deseos en las aguas de un pozo mágico.
